Al ver que que bajas la mirada,
tal vez avergonzada frente a mí,
te imagino devota arrodillada,
rezando a Dios,¡pero pensando en mí...
No hay reposo! en calma y sosegada,
te desplazas eufórica, angustiada,
tratando de centrar el sentimiento
que te agita....sólo pensando en mí!
Por esta distancia que remonta
montañas mares y colinas,
por esa emoción y ese carisma,
por tu fé...¡es que me entrego a tí!....
miércoles 23 de junio --2010
PUBLICADO POR LA COSTARRICENSE, LA CAPITANA.