Con cariño para los niños del mundo y sus padres o encargados
Hay en mi país un eminente cardiólogo y un médico sobrino suyo....Ambos son destacados ciudadanos y eminentes médicos.
No dejo de pensar en ellos cuando se presenta el tema del fútbol.
Cuando yo era niña adolescente...recuerdo que había en un pueblo vecino una familia que se destacaba por sus virtudes intelectuales, y por ser los más cultos y también se destacaron por tener buena casa y por ser gente ejemplar, casi todos los hermanos dedicados a la educación y a la enseñanza.
En un momento dado, el joven que empezaba la secundaria quizo dedicarse al fútbol y abandonar su estudio. Pero le salieron al paso los diferentes comentarios de su familia por considerar, en ese entónces lo que se estimaba en otros países desarrollados----¡El futbol es cosa de plebeyos! le dijeron y le prohibieron hablar más de su decisión.
El joven se olvidó del fútbol y siguió sus estudios ayudado por los consejos de su familia ejemplar......Con ese punto de vista , a mi me quedó una enseñanza imperecedera: es mejor el estudio, y no quisiera que los nietos lo olviden. Jugar con la bola se puede hacer en cualquier momento pero dedicarse a ella es menos intelectual.
